Tuesday, December 11, 2007

El atardecer

El atardecer me recuerda el color de tu piel morena
El aire templado me hace sentir tu aliento
La luz tenue me recuerda a tus ojos tiernos
Llenos de paz que armonizan con tu propia naturaleza
Tal cual eres, así de perfecto en tu propia esencia

El aroma de tu piel es como la suave fragancia que desprende el mar bravío
Tan natural, tan incomprensible, tan rica, tan disfrutable
Es esa fragancia que con los ojos cerrados me guía hacia ti sin equivocarme
Sin dar pasos falsos, sin titubear y sin tropezar

No pretendo quererte, mucho menos amarte
Contemplarte y disfrutarte es uno de mis mayores placeres
Me conformo con tenerte cerca y no es que no quiera lo demás
Es solo que aprendí que los placeres de la vida
A veces son intocables, a veces son inaccesibles y casi siempre imposibles.